martes, 23 de julio de 2013

Redecorando baby-room

Ayer mismo, esperábamos con ilusión que vinieras a conocer tu habitación que mamá y papá habían preparado con todas las ganas y anhelo, que como buenos primerizos derrochábamos día a día.

Bonita, la habitación quedó bonita, para que negarlo. Sencilla, funcional y dulce. Así la veíamos entonces.

Pero lo funcional para nosotros, resultó no serlo tanto para ti. No pensábamos ni por un momento en que durmieses allí a tu llegada, eso ya llegaría... Pero no llegó. Tuvimos una preciosa mini-cuna en nuestra habitación, pegadita a nuestra cama, que usaste en contadas ocasiones (creo que con los dedos de las dos manos, alguno me sobraría seguro...), pero tú preferías dormir y mamar sobre el pecho de mamá, o como muy lejos, a mi lado en la cama.

La habitación ha tenido su uso, para qué lo vamos a negar. Hemos pasado largos ratos tomando tetita con musiquita relajante, vistiéndote, jugando... Pero nunca durmiendo.

Y en las últimas semanas, no he parado de darle vueltas a la cabeza, leyendo y leyendo sobre habitaciones, espacios adecuados al niño en el hogar, sobre métodos Montessori y alguna que otra teoría que nos muestra cómo podemos crear en nuestro propio hogar, espacios más preparados para el desarrollo saludable de la personalidad y social de nuestros peques. Espacios en los que todo está al alcance de su mano, en los que no hay peligros al jugar, al saltar, al dormir, al hacer lo que quiera y se le ocurra, que es de lo que se trata, para que desarrollen su creatividad e imaginación, mediante el juego.

He leído mucho en fantásticos blogs, páginas web, he adquirido el libro "Aprender y jugar con el Método Montessori" de Lesley Britton (un libro que nos ayuda a traer a casa y a nuestro día a día las ideas de esta forma de entender la infancia y la educación, que está ámpliamente documentada y demostrada como óptima para los niños), que devoro noche tras noche, mientras que papá y yo nos hemos puesto el mono de trabajo, y vamos transformando tu nuevo espacio.

Y no es que para redecorar una habitación se necesite hacer un máster sobre fantásticos métodos... que no es eso... Es que mami cuando un tema le interesa mucho, cada vez va a más, y a más, y a más..., y no tiene fin. Y de un libro voy a otro, y de una web a otra, y de un tema a otro, porque francamente, me maravilla como las observaciones y reflexiones de una señora, que crearon todo un método hace 100 años, siguen vigentes reafirmándose hoy en día, con nuevos estudios e investigaciones al respecto. Y es que esta señora, "¡tenía ojo! te lo digo yo..." ;-)

Prometo plasmar con mil fotos (bueno, con alguna menos...), el fin de nuestra creación. Ya está cerca.

Lo primero ha sido crearnos una SÚPERCAMAGIGANTE de 2.40 X 2, trayéndonos y atando en el sentido más literal de la palabra (con bridas) la camita de 90 cm a nuestra cama de 1,50 m, para dormir los tres más a pierna suelta que nunca. Y de ahí en adelante, las ideas corren, la imaginación fluye y el pasillo y escalera se llena y vacía de trastos a una velocidad vertiginosa. Y hasta mamá te está pintando una mesita que estoy segura te va a encantar.

Tú, con tus risas, tus saltos, tus juegos y tus caras de alegría, nos reafirmas con creces que vamos por el buen camino.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ESTO