domingo, 26 de mayo de 2013

El primer beso

Mucho bombo y platillo se le da a ese primer beso de amor, ese de la adolescencia o juventud, con el que da comienzo un nuevo mundo por descubrir (no sin motivo que conste...). No seré yo quien le quite el romanticismo y mérito al susodicho, que lo tiene  ¡y mucho!. Ese beso tan esperado, tan soñado y alabado, pero que a pesar de todos los mitos que le rodean, con el paso de los años, siempre será superado y en algunos casos hasta olvidado!.

Pero ¿qué hay de ese otro primer beso?... Ese del que nadie te ha hablado, al que no se le da injustamente tanta publicidad y que cuando llega te hace casi morir de amor?...

Ese primer beso que te da un hijo, que va aprendiendo primero a hacer el gesto y el ruidito con la boca, y que va regalándolos y lanzándoselos al aire, sin saber en su inocencia que cada uno de ellos vale millones. Y que cuando te acercas preguntando si te regalaría uno de esos besitos que lanza desinteresadamente al aire, en un gesto de suma ternura lo que hace es poner su carita en tus labios para que tú se lo des.

Pero un día llega. Se acerca sin que lo esperes y te planta un muackkkk que no sé si se olvida o no, ni me interesa saberlo, pero lo que sí es seguro es que produce tanto, tanto amor, que mínimo merece ser contado y por supuesto, ser colocado al nivel de los mejores primeros besos de amor del mundo mundial.




Qué rico y delicioso ese beso con abracito incluido mi niña...
 Papá y yo nunca creímos derretirnos así por un beso.

miércoles, 22 de mayo de 2013

Miércoles Mudo: Reconocimiento a mi mamá.


Y una burbujita llena de aplausos ...
para las mamás y papás que nos leen...
 y se esfuerzan cada día por los mas peques de la casa como yo.

!Bravo por todos!
(Pero mi mamá es la mejor eh?).
BESOS, PAULA.




martes, 21 de mayo de 2013

Comienza el Cilclo de Conferencias: "Conociendo a nuestros hijos". Haciendo tribu

Este sábado dio comienzo el III Ciclo de Conferencias que llevan por título "Conociendo a nuestros hijos", organizado por la Asociación Besos y Brazos.

La primera del lote, y no ha defraudado en absoluto. José María Paricio nos habló sobre lactancia, un tema en el que se le puede considerar un experto, y sobre el que, según sus propias palabras llenas de gracia y sarcasmo, desde su cese en el hospital de Denia se dedica a conspirar.



"Ahora me dedico a hacer guardias y a conspirar sobre lactancia..."

No haré un resumen de la gran conferencia que fue, porque sería muy complicado condensar tanta y tan buena información. Y también, por qué no decirlo, porque ya lo han hecho otras con gran esmero y sin dejarse ni un ápice en el tintero. Aquí se puede leer.

Pero sí quería escribir y dejar aquí plasmado, que me gustó mucho ir. Y me gustó mucho por todo lo que se dijo y lo que aprendí. Pero lo más importante y lo que más me gustó, es que me sentí muy bien. No sabría muy bien cómo explicarlo, pero cuando entré y me senté, y observé a mi alrededor... no podía dejar de sonreir...

Los seres humanos, en nuestro día a día, nos movemos en grupos, muy diversos y heterogéneos, pero siempre vamos de un grupo a otro. En el trabajo, en el cole de los niños, con la familia, con los amigos de los tiempos de estudiante, con los que has ido haciendo por el camino, en el mercado...

Yo últimamente, en mi día a día, y con el grupo que tengo más cerquita la mayor parte del tiempo, he sentido que estaba fuera, que no encontraba mi sitio, a veces hasta sintiéndome bicho raro, o salmón nadando río arriba y contra corriente, sólo porque haces lo que crees que es lo más natural, lo que es bueno para tu hija y tu familia, lo que me sale de dentro. Al principio porque das la teta demasiado a menudo, luego porque la sigues dando, más tarde porque no te gustan las guarderías, porque quieres que se respeten sus ritmos, porque no estás de acuerdo con los castigos, con las recompensas, y un largo etcétera.

En la mayoría de ocasiones, esto no me suele afectar mucho. Estoy segura de lo que hacemos en casa, porque creo que nuestras decisiones se basan en nuestro instinto, nuestro amor y mucha información contrastada. Pero hay veces que sientes la soledad, y sientes tristeza porque te gustaría que las cosas fuesen de otra manera, te gustaría no estar sola en lo que sientes que es el mejor camino. Y piensas que para conseguirlo algo tiene que cambiar, y para que algo cambie, más personas tienen que ver las cosas como yo las veo.

Y esto es lo que sentí el sábado al entrar en ese salón de actos, y seguí sintiéndolo cuando uno por uno empezaban a hablar. Primero la directora médico del hospital, después los que representaban a Besos y Brazos, el ponente, hasta llegar a las y los asistentes. Era una oleada de optimismo, un horizonte que se abría, porque no había estado antes en una reunión con tanta gente que pensase tan parecido a mi, que actuase tan parecido y que hablase en los mismos términos. De repente ya no estaba tan sola en mis sentimientos, física y emocionalmente. Porque a veces la cercanía física también es importante.

Desde aquí, y sabiendo de antemano que probablemente no llegarán a su destino, me gustaría enviar mil millones de gracias a cada persona que está detrás de la pantalla escribiendo y dando información valiosa y poderosa, que da conferencias, que asiste a ellas, que las ve por internet, que forma grupos de lactancia ayudando y apoyando, sosteniendo a otras personas que estamos aquí, que creemos en las mismas cosas, y que a veces necesitamos de ese soporte para seguir haciendo un mundo mejor, porque de ello cada día estoy más convencida; la crianza con apego y respeto creará un mundo mejor, criará seres humanos con más conciencia de grupo, esa que tanta falta hace en los tiempos que corren, con más respeto hacia nosotros y el lugar que habitamos. Que seguramente los que estamos aquí ahora, no veamos ese gran cambio de paradigma, pero que es necesario que ocurra y que ocurra cuanto antes.

Después de escuchar a José María Paricio, mi visión es positiva, porque su visión también lo es. Desde los ojos de una persona que ha luchado en primera línea y como pediatra, por fomentar la lactancia materna, por un bien muy valioso para la humanidad,como él mismo lo describió, y que después de estudios, encuestas, y mucho mucho trabajo, piensa que algo está cambiando y que estamos recuperando algo que nunca debió perderse. Que las cosas se pueden y se deben hacer mucho mejor.

Ahora me siento un poco más dentro de una tribu virtual, que ya tengo la certeza que no es de mentira, existen y están ahí, son reales y de carne y hueso, aunque yo en mi día a día no pueda verl@s.

jueves, 16 de mayo de 2013

Nuestro día a día

Ayer fue día de San Isidro, y para muestra un botón...


La pequeña lo celebraba en su cole por todo lo alto el martes 14, con música de organillo, alguna que otra chuche y disfraces de chulapones por doquier.

Acabamos el martes rendidos, pero la noche nada más lejos de transcurrir tranquila, nos dejó unas cuantas cacas y vómitos :-s , y bastante fiebre que no bajaba de ninguna manera. Así que a eso de las 6 A.M nos presentamos en el hospital con la gordi adormilada y la mamá más aún... El papá nos llevó raudo y veloz, para que nos dijesen, (no sin alguna que otra indirecta del enfermero en cuestión, dejando caer que nuestro plan preferido un día festivo a las 6 de la mañana es presentarnos en urgencias a dar un garbeo por allí y ver cómo les va todo... grrrr....), que parecía el comienzo de una gastroenteritis por rotavirus. Que no sabemos si gracias a las vacunas que en su día tomó de este virus en cuestión, o porque está fuerte y sana como una manzana, pero lo que era el comienzo se convirtió también en el fin, y todo fue a mejor durante el día y la noche.

También tuvimos visita de los abuelitos y tíos, con el acompañamiento de Tara (la perrita) con la que Paula se vuelve literalmente loca. Sólo quiere tocarla, acariciarla, montarse encima, apachurrarla y hasta jugar con ella como si de un balón se tratase!.

Por la tarde, más visitas de su tata y tato (je je...). Y enseguida otra vez es la hora de dormir, sin que el sueño acumulado me deje ni un poquito de tregua para escribir unas letras... Y dando gracias que la noche ha transcurrido tranquila, sólo despertándonos para tomar un poco de tetita, pero por suerte reteniéndola en el estómago.

Y este fin de semana, ¡comenzamos con el ciclo de conferencias "Conociendo a Nuestros Hijos"!. Inaugurado por el pediatra José María Aparicio, que nos hablará sobre lactancia materna.

Y en las tardes del finde, tendremos cumpleaños de la Tata, viernes porque es el día, y sábado la celebración.

Y así pasa nuestro día a día. Con una chiquitina que demanda nuestra atención cada día más, aunque parezca imposible. Es una delicia ver y participar de sus juegos, su inicio lento y gracioso en el lenguaje, sus enfados y risas a carcajadas.

Y como ya suspiro y lloriqueo en varias ocasiones últimamente, no  saco ni un ratín para sentarme en mi rincón azul, en mi burbujita que tantas satisfacciones me ha dejado y me deja.

Pero este verano me voy a hacer con la maravilla de las maravillas, la gran ansiada y aclamada tablet que auguro será la solución a todos mis problemas, y que luego resultará no ser la solución de ninguno.

Pero de ilusión también se vive... ;-) Y yo sueño con esa tablita pequeña y resolutiva, como si me fuese a planchar la ropa, fregar los suelos, hacer el cocido y hasta depilarme las cejas!.

No, eso no... Pero ya me veo a última hora en la camita, junto a la gordi, robándole esos pequeños ratitos al sueño acompañada de la ventanita que me permitirá seguro, por su tamaño, su rapidez y el poder llevarla a cualquier sitito (¡hasta al baño!), conectarme en cualquier momento y lugar para poder dedicar más tiempo a este mundillo que ya me tiene enganchada.

¡Ya sueño con el momento!

domingo, 5 de mayo de 2013

Feliz Día de la Madre

Hoy es el día de la madre, todos los días me siento igual de madre, igual de feliz, igual de guapa cuando me miro al espejo y asoman esas ojeras, ciertas arrugas y alguna que otra pequeña estría en el pecho. Y sí, me veo guapa, porque los noto signos de más conocimiento, de ser más madre cada día, de estar más llena que nunca y más feliz de mi condición.




Y aunque todos los días lo disfruto y lo celebro en ese sentido, los "días de", lo celebro también y si cabe, nos paramos un poco más a pensar en la felicidad y la necesidad de disfrutarlo hoy, y el resto del año. Mi niña me regala una flor hecha con papel de seda que ella misma rompe un poco más tarde... Y disfrutamos juntas de un día lleno de besos, de amor, de mimos, de teta, que no se diferencia en casi nada de ayer, y seguramente de mañana, pero es bonito a veces hacer un alto en el camino y celebrarlo.

Y por qué no decirlo, aprovecho para sentirme también más hija que nunca, con más agradecimiento cada día por esos valores y las enseñanzas transmitidas, por la felicidad que me da sentir que formamos todas una cadena de inmortalidad, porque venimos una de la otra y todas nos pertenecemos.



Y también guardo hoy un huequito o huecazo... para el papá de la criatura, que nos cuida y nos sostiene, y que nos allana los caminos del día a día, y la maternidad así se hace mucho más fácil y placentera.















Por todo eso y por mucho más, todo mi amor hoy para la mamá de mi mamá (la Beli), para mi mami y para el amor de mi vida que me hace cada día más y más feliz y plena, mi niña. Y de ahí en adelante, espero que la cadena siga y siga, y no se detenga a través de la maternidad.











ESTO